Despensa

Imagen vía Decorology

El uso de la despensa, y una buena organización de la misma nos puede ayudar mucho, tanto a ahorrar tiempo como dinero y energía.

Disponer de una buena despensa significa ir a comprar con menos frecuencia, poder planificar mejor las comidas, y también poder improvisar cualquier cosa rápidamente, porque tenemos nuestra despensa bien surtida, y además nos permite comprar ciertos productos de larga duración cuando están de oferta, sabiendo que los podemos almacenar por largo tiempo (por ejemplo latas de legumbres o verduras) porque disponemos de espacio para ello.

Es importante tenerla bien organizada y ordenada para siempre saber que productos tenemos y que cosas necesitamos ir reponiendo, además de que es más cómodo acudir a una despensa bien organizada, donde no hay que estar removiendo paquetes, latas y bolsitas para ver si logramos encontrar ese sobre de sopa de cebolla que estamos segurísimas que compramos hace un mes, y creemos que no hemos utilizado todavía... o puede que sí... Si la despensa está ordenada, enseguida sabremos si tenemos o no sopa de cebolla deshidratada sin tener que descolocar nada.

Una despensa es el centro, el núcleo de una cocina. Es lo que nos va a solventar muchísimas situaciones de nuestra vida cotidiana, así que invirtamos tiempo en planificar bien lo que vamos a incluir en ella y como vamos a distribuirlo. Valdrá la pena.